“Tita” Brivio: la última Cacique, militante de la vida

ESCRIBE ALBERTO GUILLEN

Siento un extraño privilegio, el haber sido el último periodista en entrevistar a “Tita” Brivio. Aquella tarde, a las quince y treinta, un rato antes del fatal accidente que le ocasionara la muerte, cuando se sentó frente a mi intuí lo que vendría.

Ví su rostro cansado, sus ojos tristes, su lucha denodada por hacer realidad su sueño, y tuve dos pensamientos que callé "...y si esta mujer no llega a ver su trabajo terminado? " "...seguramente éste lugar llevara su nombre " Y dije al aire "para  ésa gente que le va muy bien... un millón no existe, bien pueden donar el dinero y terminar esta obra".  Inclusive días después cuándo hablé con su hija y me dijo que se encontraba mucho mejor, no le creí, tengo derecho, dije.

La premonición se cumplió. Seguramente ahora el trabajo se concluirá porque el dinero aparecerá. Sirve para los que quedan. Ella se fue con el corazón amargo por no haber podido cumplir con ella misma.

Ah ,qué cosa la vida !!!....Qué cosa !!!...Tan insospechada, tan injusta, para muchos. Y tan benévola con a veces los que menos se lo merecen.

Siento un dejo de tristeza. Y mientras escribo la columna, los ojos no dejar de derramar lágrimas. Estas mujeres , con el perdón a todas la mujeres, ya no vienen mas. Son una estirpe en extinción. Caciques. Matronas. Impulsadoras de Ideas. A pura fuerza Bruta. Derribando muros. Imponiendo autoridad. Apasionadas. Enarbolando promesas, sin riesgo de quedar en soledad frente al mundo. Militante de la Vida.

TITA tuvo amigas y amigos que le siguieron y acompañaron en la aventura de vivir, mirando siempre hacia adelante.

Fue amiga, mucho menor, de ANTONIA GIMENEZ , mi abuela materna, y supe por ella que de jovencitas  soñaron, siempre pensando en los demas, ilusionadas en hacer realidad esos sueños.

La sociedad toda le debe el verdadero reconocimiento, que jamás recibió en vida, y los poderes económicos y políticos las respuestas inmediatas para su CENTRO DE SALUD MENTAL .

Aquella tarde, fue la despedida, antes que el fuego, que todo devora, la desembocara al final.

TITA te recordaré con el mismo cariño y respeto que siempre te tuve. Con admiración profunda y el orgullo de haber conocido a una mujer íntegra en sus convicciones, en sus sueños, en sus ideales, hasta en sus errores y defectos. Querida amiga, Dios te reciba en Paz.(fuente: abchoy)


Nota del blogger: Para los viejos peronistas tandilenses es una figura controvertida. Su historia es apasionante, y digna de colocarla entre las féminas que marcaron la vida política y social de nuestra aldea. Es un referente insoslayable para conocer la vida política lugareña de Luis María Macaya y el periodo de reclusión de Carlos Saúl Menem en la ciudad.